Síguele, anda.

viernes, 29 de noviembre de 2013

365 Días.




No sé si sea casualidad o destino, pero hoy, por una razón que no me logro explicar, me vi atraída hacia aquí. 
Hace 365 días acababa de cumplir dulces dieciséis años,  traía el corazón roto, estaba considerando empezar una relación con un chico que se veía que me ADORABA con su vida, Volvía a enamorarme de mi segundo mejor amigo aunque no quería admitirlo, mi primer mejor amigo era mi mundo entero, con él compartía todo mi día, mi comida, mis secretos, y mis penas, y todo mundo pensaba que yo estaba a punto de confesarle mi amor, recursaba y todo me valía un soberano cacahuate porque según yo "estaba chava". 

Y pues sí, sigo estando chava. 

365 Días después, heme aquí, encerrada en casa, como hace un año, con 17 primaveras, mi corazón roto de nuevo, siendo amiga de aquél chico que terminó conmigo hace un año, siendo odiada por aquél que me adoraba, ignorada por mi segundo mejor amigo y compartiendo apenas con suerte dos días al mes con mi mejor amigo, en mi segundo año de la prepa, con miles de preocupaciones escolares, mi madre con pareja, mi primo de un año, Mi tío separado y yo sin hallarme aún. 

Es increíble cómo pasa el tiempo, y cómo tiene el súper poder de hacerte cambiar tanto. Las cosas que hace un año yo creía seguras en mi vida, brillan por su ausencia, y las que menos me esperaba, son las que se dieron. Supongo que así es esto, una rutina de continuos ires y venires, y supongo que eso es bueno. Me enfrenté a un montón de cosas en este año, podría decir que fue el tiempo de los cambios, y drásticos. 
Mi mejor amigo no está estudiando, Mi otro mejor amigo cortó con su novia, regresó con ella y prácticamente ya no somos nada. Me gusta un chico, pero simplemente al parecer, yo no soy su tipo. La mitad de mis amigos se salieron de la escuela y me quedé como la única chica de mi grupito. Empezamos a juntarnos con un grupo más grande, pero yo no me acostumbro. Le estoy echando ganas a la escuela, y siento que nada basta. 
Pero en fin, gracias a Diosito, sigo viva, y con miles de posibilidades para regarla. 
No sé si creer en el destino, o en la coincidencia. A veces me inclino más por el hecho de que las cosas que me pasan son mayoritariamente destino. He conocido personas que a todo lo negativo que les pasa lo llaman "Coincidencia" y a lo bueno "Destino". Yo no soy de esas. Quiero creer que las veces que me he equivocado, han sido por algo, porque alguien me quiere enseñar algo importante, y va funcionando poco a poco, porque hasta ahora he aprendido bastante. Y también, que las veces que me pasa algo bueno, es porque algo estoy haciendo bien. 

Hace un año exactamente dejé mi último post aquí, y tal vez muchos de ustedes ya ni me recuerden, pero yo sí, y quiero decir que extrañaba inmensamente escribir, no importa si ya no tenemos tantos seguidores como antes, o si de plano nadie nos recuerda. Escribiré para mí, para llenarme. 

Un besote y que tengas un buen día, lector que cayó aquí por coincidencia o destino :* 

AleUh <3